¨Hace tiempo que sé que el mundo no es mío, ni mi hogar.
Si la vida es una orgía, yo voy de paja mental.
Puritita fantasía; nada menos, nada más.¨

martes, 30 de agosto de 2011

Rocío

Siempre merecemos saber cómo se siente lo que hacemos.
Ojalá, vos no sientas nada; ojalá, el viento se haya llevado todo
sin dejar rastros, rostros, ni cicatrices.
Lo digo porque te imagino desgraciada, lacrimosa en tu soledad;
estática en tu condena, aferrada al vacío de la almohada,
al perfume persistente del recuerdo.
Ojalá, alguien te quiera mejor... ojalá hubiera sido yo.
Debiste haberme visto como espiritu, o energía que circunda;
en el último de los casos, como humano.
Antes de verme mujer, antes de verme medio homosexual;
debiste verme a mi, que no me parezco a nada de lo que conoces,
y que, me quedé acá, queriendote,
donde nadie sabe cómo sos, en donde a nadie le contas.
Te quise en tus injurias pero mas en tus sonrisas
y en tu voz de noche muerta; te quise en la sombra de tu pelo
y también en tu desprecio.

Yo, mi pluma y mi espada.


Yo, monarca de mis poemas,
reina absoluta de mi extensión desértica
y mis rincones de telaraña,
sembrada de hierba, sol y lunas
Yo, frontera con todo.
Muro inconsistente de palidez y verso;
estación de trenes llena de despedidas,
de mortajas elegantemente crueles;
me refugio en el olvido,
me saturo de charcos estrellados, yo.
Indiscutible soberana; dedos largos como espadas,
música que trepa la cama, real visión de lo que imaginas,
silencio letal que no quiere decir nada.
Yo, el poderío de mi ejército;
juez de mis pensamientos;
verdugo de mis actos.
Yo, emperatriz de mi melancólica tinta;
le declaro la guerra a esa...
mi sombra apretada contra el cuerpo,
contra en la pared y contra tu insistencia.

sábado, 27 de agosto de 2011

IX

Tengo un montón de palabras sin un momento oportuno;
versos de una intensidad provocadora, de fuego y piel,
imágenes como cuchillos que arden.
El viento frío, la humedad, los momentos vencidos;
todo quiere entrar por la ventana
y nada cabe en la hoja, nada se escribe.

El gato

El gato se infla y se desinfla, ajeno a todo, no le importa na.
Sólo respira con los ojos entreabiertos.
El gato escucha mi respiración y estira su corta longitud
sobre mi cubrecamas.
Mientras yo me quemo los dedos, el gato abre un ojo para verme.
  Elegante en su silencio, me chamuya:
Los inviernos, son más estimables en los recuerdos;
dice sin decir, mientras le cae el sol en el lomo atigrado.
Necesito del sol para curarme,  del pasto brotando sigilosamente,
del trinar de los pájaros. Necesito a clamor silenciado
y temblando en tu cama, del calor para vivir.
Y necesito de los colores...
y de la libertad de movimiento en los techos.
Para poder fundirme y estañarme al todo,
necesito al calor;
a la luna desnuda en el cielo,
al sudor del campo entre los árboles levantándose,
al arrullo tibio del verano que me lame los hombros
y me afila la tristeza.
Preciso sus letras y el anaranjado horizonte que me llama
con aullidos en la distancia;
que me flajela con recuerdos mal dosificados.
Para maullar cálidamente sobre mieles dulces y exóticas;
para recobrar la memoria de otros calores,
de otros lugares y con otras personas:
Imploro la perpetuidad del calor y la desnudez del sol.

VIII

A mí, que no salgo a la calle, me golpean la puerta?
y qué esperais encontrar,
A la descencia con sus trapos largos y sobrios?
A la Rosada Simpatía, rimbombante y plena?
Por favor, mi nombre es Soleda´


Planto aquí, en la inmensidad de esta llanura, mi bandera:
LA ESTUPIDEZ ME PERTENECE.
y también son míias las aristas de lo real y lo que no.
Mía la frontera de lo incierto.

Soy una incógnita que no quiere ser resuelta.
Una pregunta a la que no le urge respuesta.

No quiero saber, ni me interesa.
Soy el goteo constante y tortuoso en el techo;
con el tiempo, deshago estructuras
o con el tiempo, desaparezco.
pero sin dudas mis grietas quedan.

miércoles, 17 de agosto de 2011

El borracho juega ser poeta

Borrachos caídos, en las veredas, 
rebalzando vino y derramando sangre; 
poetas ebrios que le aullan al cielo aunque haya amanecido.
Al poeta, le sobran huevos, sobre todo si está borracho.
Al borracho le sobran poetas, sobre todo si hay Luna.

Los borrachos jugando a ser poetas,
declararon sus amores a gritos de pura cantinela.
Los borrachos, sucios y harapientos
los poetas, de mierda.
Elevedos monticulos de palabras apiladass en suelo,
la gente que pasa, la poli que vigila el palpitante montículo de escombros
donde se escurre la miel mas espesa,
el borracho que juega a ser poeta.
 

sábado, 13 de agosto de 2011

EL ÉXTASIS DE LA CONTEMPLACIÓN

Un inquietante mutismo. Una aseveración profunda. Una fuerte discusión conmigo, hasta encontrar el silencio. El palpitar despiadado del tiempo, el ruido de la noche, El devenir del ensueño. Luego, una mosca vuela y el horizonte se estira.
Yo, sin cuerpo; yo sin peso, como una sombra luminosa o como vapor, como humo cetrino y traslúcido; yo como la mosca...
Los nauseabundos humanos, el olor a mierda del dinero, los defines que vi masacrados, los muertos, los perros mojados. Yo con mi alas pestilentes de horrores en los que me revuelco. Luego un gato que corre. Y la noche me traga. Yo, en la noche. Con la luna; mis ojos amarillos, la luna atigrada. Yo como la luna, solo miro...
La indecencia del viento, el sabor del espacio, los cometas, los misterios, los poemas, Los poetas de mierda. Yo, viendo mi cuerpo físico; sentada, escribiendo.Yo, Un poco más liviana, un poco mareada, un poco extasiada.

VII

Ella le sacude tó lo simientos,
con su exorbitante sonrisa, hace que se le caiga tó las hojas;
lo deja desnudo y tiritando de invierno.Y le surjen como gusanos de una herida abierta

palabras que desangra, y que sufre tan placenteramente; cuando se las clava.
El se retuerce por dentro...
Ella lo desarma en escombros y lo diluye en saliva.
Se ahogan de tanta ausencia; de tanta lluvia, de tanto tiempo que se discurre.

Yo miro de lejos cómo se hieren y que gracia me causan.

Ella contiene su histeria; el modulas las groserias...
como en el cortejo de los pájaros hacen piruetas para exibhirse...
Él le grita versos, malisimos versos y ella? lo convoca en brujerías
a la luz de una luna desnuda y distraída.


miércoles, 10 de agosto de 2011

VI

Para escuchar lo que escribo, cerró los ojos;
cantó mi silencio, gritó mi pensamiento;
 cerró los ojos
como percibiendo mi goteo
que, como hojas, irremediablemente volátiles
esparcen todos los matices sobre su horizonte.
Con esa noche herida de cielo roto,
desarmó mi alma, desafiló mi lápiz
con los besos de su estigmática boca
y renovó estas palabras,
muertas y enterradas.

viernes, 5 de agosto de 2011

La nota

Una hora es demasíado para mí, un día es una eternidad; desde hace miles de eternidades, no he podido abolir tu poesía de ciertos pensamientos que te relacionan, directamente, con actos, honestamente; antihigiénicos e indudablemente sexuales; y con el repugnante placer por la carne.
Pasa a mi lado tu olor de impura mortalidad y me debilita el éxtasis; por favor, te invito a sucumbir al deseo, a desvestirnos de la formalidad humana y a ser como animales. Te invito a que el desenfreno nos clarifique el olvido y no haga puros como el vidrio; blancos de sustancial humedad y brillantes como el sol.
Pero no quiero que te alarmales ni te escandalices, te participo también, y sin dudar, de mi amor espiritual; no sin antes el sexual. Espero sepa comprender mi egocéntrica autopreservación; la estupidez no me destaca.

debajo un número, al que, por supuesto, llamé inmediatamente.

jueves, 4 de agosto de 2011

Necesito - una Palabra

Necesito una palabra,
alguna que no signifique demasiado;
que me lleve de una punta a la otra
sin movilizarme un poco,
no digamos amigos, pintura, ni música.
Una Palabra que pueda relacionar
con otra que también carezca de valor;
sin decir jazmines, Lunas, ni Lourdes.
Que me haga liviana con su contundencia,
como un liberador disparo en la sien
o como los aullidos lamentables de un cortejo fúnebre.
Una palabra que sea una puerta a otra
y no el pasillo entre los versos;
que abra oraciones
y llame a cada cosa por su nombre,
sin vestir con los ampulosos trapos de la metáfora
mi esquelética imaginación,
muerta de frío bajo el cobijo de los libros
rendida al silencio del humo
y al calor de la estufa.
Con urgencia, necesito una palabra
y poder redactar un CV como la gente normal lo hace;
sin imágenes, sin música, sin mi.
Conseguir un trabajo donde me oprima el culo
el pantalón bien puesto y un reloj,
que recuente horas, tras horas, tras horas.
Debo aprender a quitarle a las palabras el sentido que le di;
si quiero ser socialmente adecuada
si, señor; cómo no, señor; enseguida, señor;
por favor y gracias... señor.

Nadie recuerda a Ariza,
sólo yo y algunos mas,
sólo yo y otros herederos del placer por la tinta,
del vicio de conquista y del amor por el amor.
/Lo que no recuerdo es el nombre de ella,
de la mujer de Florentino/
Sólo recuerdo al poeta y la poesía que nunca existieron,
no soy de los que se obtinan con las musas,
las lunas siempre se renuevan.

Por eso, necesito una palabra que se convierta en mí,
para que no me olvide; una fotográfica palabra de mis besos.
Sería la única manera...
Cuando por fin tenga mi palabra perfecta
y mi verso sea el húmedo fulgor de los labios ajenos,
y mi poesía sea hermosa y clara;
encontrarla, desnuda y entera,
sobre mis hojas, casi escrita, indeleblemente.